martes, 26 de julio de 2016

Cap 7 Hijo de la Caza

-¿Que fue lo que paso?- pregunto Annabeth, ella abrió los ojos para tratar de ver en donde estaba, su cabeza aún le dolía demasiado pero ella logro ponerse de pie, rápidamente recordó todo lo que había pasado y como Percy las había atacado. -¿Clarisse? ¿Percy? ¿Chicos donde están?- pregunto ella mientras recorría el barco en busca de sus compañeros.

Ella estaba apunto de bajarse del barco cuando alguien la sujeto por la espalda, colocando una mano sobre su boca. -Espera Annie, hay alguien que está rodeando el barco.- murmuró Clarisse con preocupación antes de soltar a la hija de Atenea.

-Revisen el barco, debe de haber alguien en su interior, nuestra señora nos dijo que este tiene que ser el barco.- grito una voz, ambas chicas prepararon sus armas para pelear pero un rugido infernal se escucho por los cielos. Annabeth levanto la vista para encontrar a los causantes del ruido, pero se quedó sorprendida por lo que vio.

-Corran, son Keres ellas están aquí.- grito la misma voz pero esta vez llena de miedo y pánico, Annabeth se quiso poner de pie pero Clarisse la sujeto del hombro. De pronto varios monstruos alados aparecieron sobrevolando el lugar rugiendo desesperadamente, tratando de atacar a los hombres que se alejaban del barco.

-El debe de estar aquí, busquen por toda la isla. Destruyenla si es necesario, pero quiero al hijo de Poseidon ante mi.- rugió una mujer con apatía, los monstruos alados sonrieron maliciosamente antes de dirigirse directamente hacia donde estaban los hombres.

-¿Que es lo que está pasando?- murmuró Annabeth cuando vio que las figuras ya estaban lejos, -Me quieres explicar lo que eran esas malditas cosas.- Clarisse se quedó en silencio mientras examinaba el cielo en busca de algunos de los monstruos.

-Esas son las Keres, son espíritus de la Destrucción, ellas siempre acompañan a Enio en las batallas.- explico Clarisse, Annabeth vio a su amiga para que le explicará bien todo el asunto. -En la antigüedad cuando a mi padre se le encomendaba una misión, él primero mandaba a tres personajes para atormentar a sus enemigos, Fobos, Deimos y Enio.-

-Ahora lo entiendo todo, las personas que vimos en el embarcadero eran ellos verdad, fue por eso que Percy nos atacó durante el viaje. ¿No es así?- dijo Annabeth entendiendo todo lo que había pasado.

-Si, yo vi a Percy cuando se dio cuenta de lo que estaba haciendo. Después de eso, él te ayudo, se veía muy afectado por haberte lastimado.- explico Clarisse, Annabeth asintió con la cabeza, después de todo Percy no la había atacado por su propia voluntad.

-¿Y donde esta Percy?- pregunto la hija de Atenea, tratando de encontrar a su amigo por algún lugar.

-No lo se.- respondió con frustración la hija del Dios de la Guerra, -Mientras que tu estabas inconsciente nos encontramos con Caribdis y Escila, si no hubiera sido por Percy no creo que hubieras escapado.-

La cara de Annabeth se lleno de preocupación esperando que su amigo estuviera a salvo, -Entonces si Enio esta aquí, eso quiere decir que Ares la mando para buscar a Percy.- dedujo la hija de Atenea al reunir todas las partes del rompecabezas.

-Bueno eso puede significar que Percy sigue vivo, si no mi padre no los hubiera mandado hasta aquí solo por su cadáver.- dijo Clarisse con una sonrisa esperando a que su amigo estuviera vivo. -No me gusta decir esto, pero hay que seguir a las Keres, ellas pueden llevarnos hacia donde esta Percy.-

Annabeth asintió con la cabeza mientras ambas caminabab por donde las Keres sobrevolaban tratando de no llamar la atención de estas y tratando de mantenerse ocultas, de estas que atacaban a cualquier objeto que se movía.

-Esto es raro.- murmuró Annabeth mientras se daba cuenta que entre más profundo estaban de la isla, más lobos y leones habitan por todo el lugar, pero ninguno de estos daba señales de querer atacar a las chicas. Annabeth se detuvo de pronto al procesar todo, su suerte a cada paso era peor.

-¿Que es lo que pasa?- cuestionó la hija de Ares cuando vio que su amiga se había quedado inmóvil.

-Esto no es nada bueno.- dijo Annabeth mientras señalaba hacia un pequeño grupo de lobos que se encontraban un poco cerca de ellas.

-¿Que le tienes miedo a los lobos?- cuestionó Clarisse con sarcasmo, pero la hija de Atenea negó con la cabeza. -No tenemos tiempo para esto Annie, hay que encontrar a Percy.-

-Ve lo que tenemos alrededor Clarisse, eh visto a varias manadas de leones y lobos por todo el camino, ¿no te has dado cuenta?- dijo Annabeth, pero la hija de Ares seguía sin entender lo que pasaba, hasta que su amiga señaló hacia una pequeña mansión que estaba a unos 500 metros de ellas. -Si no me equivoco, esta es la isla Eea y ese es el palacio de Circe.- la cara de de Clarisse de cayó al ver que probablemente Percy estuviera en el castillo de la famosa hechicera.

-¿Crees que Percy este ahí?- cuestionó Clarisse tratando de encontrar un plan para enfrentarse a Circe. Annabeth señaló hacia el cielo para ver como varias de las Keres intentaban entrar en el perímetro del palacio, pero estas chocaban contra una barrera invisible.

-Eso responde a tu pregunta.- respondió Annabeth.

-Maldición.- dijo Clarisse cuando una de las Keres había caído justo detrás de donde estaban, ella abrió la boca emitiendo un grotesco ruido ambas niñas se pusieron de pie antes de que este monstruo se les abalanzara sobre ellas, Clarisse logro dar un salto para evitar el ataque pero Annabeth se quedó inmóvil logrando así que el monstruo la sujetará por el cuello antes de elevarse por los aires. Clarisse trato de ayudar a su amiga pero cuando estuvo lo suficientemente cerca el monstruo ya había elevado por los aires a su amiga. Ella logro apuñalar a este en el pie provocando que esta la soltará haciendo que esta se golpeara duro contra el piso. Clarisse rápidamente saco su lanza para deshacerse de las más cercana a ellas, pero esto había alertado a las demás.

-Lo siento Annie.- dijo Clarisse mientras jalaba a su amiga hacia donde estaba el palacio de Circe, Annabeth quiso reclamar pero cuando vio hacia el cielo se dio cuenta que varias de las Keres se dirigían hacia donde estaban ambas.

-Eso estuvo muy cerca.- dijo Clarisse tratando de recuperar el aliento cuando por fin habían logrado atravesar la barrera dejando a las Keres atrás, quienes golpeaban la barrera con furia.

-Creo que tenemos que buscar en el palacio, ojalá Percy este bien.- dijo Annabeth mientras veía el palacio de Circe.

-¿Tienes algún plan para derrotar a Circe?- pregunto Clarisse esperanzada de que su amiga tuviera un plan. Ella asintió sonriente a su amiga tranquilizando a ella.

-Si, solo tenemos que buscar donde esta Percy y después vamos a obligar a Circe a que lo devuelva a su forma y después vamos por el maldito Vellocino para después poder tomar una larga siesta en mi cama.- explico Annabeth con una sonrisa antes de sujetar su daga, Clarisse soltó una pequeña risa antes de seguir a su amiga.

Ambas entraron en el castillo con sus armas listas para cualquier ataque, pero en el palacio solo había animales, -¿Crees que alguno de ellos pueda ser Percy?- cuestionó Clarisse mientras señalaba a algunos de los animales que habían en el palacio, Annabeth vio detenidamente la habitación hasta que señaló a un lobo que dormía plácidamente.

-Creo que puede ser él, es más hasta babea igual que Percy, definitivamente es ese.- respondió Annabeth con una pequeña sonrisa, Clarisse trato de responder pero una fuerte explosión proveniente de la puerta del palacio las distrajo ambas trataron de esconderse esperando a ver quien había sido el atacante.

-CIRCE.- grito Enio con molestia mientras entraba en el castillo de la hechicera, una mujer pelirroja apareció frente a la Diosa menor provocando que todos los animales que se encontraban en el vestíbulo se inclinaran ante su presencia.

-¿Que es lo que deseas Enio?- respondió Circe tranquilamente mientras acariciaba a uno de los leones. -¿Por qué irrumpes así en mi palacio?-

-Déjate de juegos Circe, se que el hijo de Poseidon esta en este lugar exigo que me lo entregues en este momento.- respondió Enio amenazando a esta con su lanza. Circe levanto la mirada para ver detenidamente a la Diosa antes de soltar una pequeña carcajada.

-Yo no veo a ningún hijo de Poseidon en este lugar Enix, solo somos tu y yo y por supuesto mis queridos amigos.- dijo Circe tranquilamente pero sus ojos ardían en rabia.

-Tú hiciste un trato con mi Señor, ¿O es que acaso se te olvida?- rugió Enio con furia, la sonrisa en la cara de Circe solo se incremento al escuchar esto.

-Me temo que tendré que rechazar su generosa oferta, pero alguien me ha ofrecido algo mejor.- respondió Circe con una sonrisa, Enio vio con furia a la Diosa antes de abalanzarse sobre esta, pero Circe respondió con una bola de energía deteniendo a Enio. -Tranquilos, yo me encargaré de ella.- dijo Circe cuando vio que todos los animales del lugar rugian con furia.

Enio se puso de pie viendo con asco a Circe, -Te has equivocado Circe.- dijo Enio mientras trataba de atacar a la hechicera la cual respondió con varias bolas de energía pero ella logro esquivarlo, Enio estaba apunto de apuñalar a la Diosa, pero una lluvia de flechas detuvo a la Diosa, haciendo que esta se diera cuenta de la persona que buscaba.

-Es hora que conozcas tu muerte niño.- rugió Enio mientras trataba de sujetar a Percy pero de pronto todos los animales del vestíbulo se abalanzaron sobre la Diosa.

-Largo de aquí, el barco de tus amigas esta muy cerca yo me encargo de ella, recuerda que tienes que evitar a las sirenas.- dijo Circe viendo seriamente a Percy, él asintió con frustración con la cabeza mientras corría hacia la salida del palacio solo para ser detenido por Annabeth y Clarisse.

-¿Chicas que es lo que hacen aquí?- cuestionó Percy con curiosidad al ver a sus amigas en el palacio de Circe, Annabeth trato de responder pero de pronto las Keres lograron entrar en el palacio, dirigiéndose directamente a donde estaba Percy. Él utilizo sus poderes sobre el agua para crear una barrera de hielo para detener a los monstruos antes de jalar a sus amigas por los brazos tratando de correr lo más rápido posible hacia donde estaba el barco.

-Cuidado.- grito Annabeth cuando vio que una de las Keres estaba apunto de sujetar a Percy, pero este logro agacharse para después disparar varias flechas en dirección a esta, él se puso de pie de inmediato antes de subir a toda velocidad al barco.

-Suban rápido.- grito Percy desde la cubierta del barco antes de convocar sus poderes sobre el mar para hacer que este se alejará lo más rápido de la isla, el echo un último vistazo hacia el palacio de Circe esperando a que esta estuvieran bien.

Salto de Línea.

-¿Señora esta bien?- pregunto Zoe mientras se acercaba a la Diosa de la Caza, ella sabía que la Diosa estaba preocupado por Percy Jackson quien había partido en busca del Vellocino de Oro.

-Si Zoe, es solo que han pasado dos días y Percy aún no se ha comunicado conmigo, estoy muy preocupada por él.- dijo Artemisa con frustración.

-Señora usted debe de estar tranquila, Percy va a estar bien. El después de todo es un cazador y sabrá como defenderse. Y además creo que el no ha mandado un mensaje Iris para no alertar a sus compañeras.- explico Zoe tratando de tranquilizar a la preocupada Diosa, ella estaba apunto de hablar pero Poseidon apareció frente a ellas.

-Tenemos un problema.- informo Poseidon, -Hace una hora acabo de detectar un desequilibrio en el mar, me temo que Percy se vio obligado a usar todos sus poderes, lo peor es que Zeus pudo darse cuenta de la presencia de Percy.-

-¿Que fue lo que paso?- pregunto Artemisa con bastante nerviosismo, si Percy había utilizado sus poderes sobre el agua era por que estaba en serio peligro. -¿Donde está? Tengo que ir a ayudarlo.-

-Eso no va a ser posible hermana.- declaró Atenea mientras aparecía justo enfrente del Dios de los Mares. -Mi padre se ha enterado de la existencia de tu hijo y esta muy paranoico.-

-¿Qué? ¿Como se entero?- cuestionó Artemisa mientras Poseidon sujetaba con furia su tridente.

-Fobos, Deimos y Enio fueron los que le contaron a mi padre, que ustedes dos juntos con Hades, Ares y Apolo tramaban un ataque hacia mi padre, para retirarlo del poder.- explico Atenea tranquilamente.

-Ahora más que nunca tengo que ir a buscar a Percy no puedo permitir que mi padre le haga daño, el sería capaz de matarlo.- dijo Artemisa con severidad pero Atenea negó con la cabeza.

-Mi padre ha mandado a vigilar a cada uno de ustedes, él no quiere que vallan a interrumpir su plan. Si vas por él solo harías que mi padre ataque a las cazadoras como venganza.- respondió Atenea con tristeza.

Artemisa suspiro con frustración al ver que no había otra forma, -Puedo ir a hablar con mi padre y explicarle todo lo que ha pasado y que Percy también es mi hijo. Eso ayudaría, ¿no? El sabe que yo nunca lo traicionaría.- cuestionó la Diosa de la Caza mirando suplicante a su media hermana.

-Lo siento Artemisa, pero eso no ayudaría. Mi padre está muy paranoico y además Hera se puede enterar que tu tienes un semidiós y tu bien sabes que ella te ha odiado desde tu nacimiento, eso solo incrementaría el número de Dioses que lo quieren matar.- dijo Atenea con una sonrisa triste.

-¿Entonces que podemos hacer para ayudar a Percy?- pregunto Poseidon. ¿No podemos dejarlo solo?-

-Solo queda esperar a que Percy regrese del Mar de los Monstruos ahora no podemos hacer nada sin alertar a mi padre.- explico Atenea. -Pero aún tenemos una ventaja, ellos buscan s un hijo de Poseidon, gracias a la posición de Hecate él puede eludir a Enio y poder regresar a salvo.-

Artemisa aún estaba molesta por no poder ayudar a su hijo pero ahora no podía hacer nada, -Artemisa, mi padre quiere verte en el Olimpo.- dijo Hermes con una sonrisa mientras aparecía en el campamento de las Cazadoras, ella asintió con la cabeza antes de teletransportarse hacia la sala del trono.

-¿Quería verme padre?- pidió Artemisa mientras se inclinaba ante el Rey de los Dioses.

-Levántate Artemisa.- rugió Zeus viendo fijamente a la Diosa de la Caza, -Quiero que envíes a tus cazadoras hacia el Hotel Loto, al parecer hay dos semidioses muy fuertes escondidos en aquel lugar.-

Artemisa asintió con nerviosismo, pensando en como podía avisar a Hades de lo que quería su padre, -Eso no es todo Artemisa.- rugió Zeus cuando vio que la Diosa esta apunto de irse. -Quiero que tu vallas hacia el Monte Otris, al parecer a había mucha actividad de monstruos por aquel lugar y me temo que tiene que ver con algún Titan.-

-Si padre, las cazadoras saldrán hoy hacia el hotel Loto y yo me encargaré de revisar el Monte Otris.- dijo Artemisa con severidad mientras le hacía una última reverencia al Rey de los Dioses.

¿Que les pareció el capítulo? ¿Por qué Circe habrá ayudado a Percy? Bueno me gustaría comentarles que quiero abrir un Blog, para poder subir los demás capítulos y algunas historias nuevas que estoy empezando a escribir y me gustaría que ustedes me pudieran ayudar para el nombre del blog. Se aceptan sugerencias y también les quiero informar que estoy apunto de terminar la edición de mis historias así que muy pronto voy a poder enviar a ustedes los PDF.

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