Capítulo 12 Hijo de la Caza

Había pasado un día desde que habían capturado el Vellocino de Oro y hasta ahora tenían un viaje tranquilo ningún monstruo los había atacado, pero en ves de tranquilizar a todos los chicos, eso los ponía más nerviosos como si estuvieran a a punto de ser atacados- ¿Aún falta mucho?- pregunto Annabeth con curiosidad, ella ya quería llegar al Campamento Mestizo para aclarar las cosas con Luke, aunque sabía que todas las pruebas apuntaban a que este era un traidor, solo esperaba que se equivocara.

  - Ya estamos cerca, si no me equivoco creo que estamos por Carolina del Norte creo que estamos a un par de horas del Campamento.- respondió Percy tranquilamente.

  - Es bueno viajar con tu brújula especial, eso hace el viaje más fácil.- dijo Clarisse mientras golpeaba a este en el hombro, él le saco la lengua a ella como respuesta. - Que maduro Percy, que maduro.- Él se le quedo viendo fijamente antes de mojar a esta.

  - ¿Perdona que habías dicho?- dijo él con una sonrisa juguetona, - Es que tenía algo en el oído.- Clarisse lo vio con furia estaba apunto de golpear al hijo de Poseidon pero Annabeth la detuvo.

  - Dejen de estar jugando parecen dos niños pequeños.- regaño la hija de Atenea con furia, Percy vio con enojo a esta antes de mojar a Annabeth.

  - Vámonos Percy creo que es mejor dejar a la niña grande a solas.- dijo Clarisse mientras abrazaba a este antes de alejarse de la furiosa hija de Atenea, Reyna y Hylla solo negaron con la cabeza al ver la actitud de sus compañeros de viaje.

  - ¿Como es que eres tan bueno para saber donde estamos?- cuestionó Hylla tratando de averiguar por que este sabía donde estaban.

  - Creo que se lo debo a mi padre, siempre que estoy en el mar me puedo orientar sin ningún problema.- respondió el mientras se encogia de hombros, antes de detener el barco sorprendiendo a las chicas, las cuales vieron interrogantes a este para saber que paso. Pero antes de que ellas pudieran hablar él convocó su arco disparando varias flechas hacia el cielo matando a varias Keres que se habían acercado al barco, las demás chicas levantaron sus armas para prepararse del ataque pero este nunca llegó.

  - ¿Que es todo esto?- cuestionó Clarisse intranquila al ver que no había otro ataque, pero notaba como estas sobrevolaban el cielo esperando para atacarlos.

  - Enio esta muy cerca, no bajen la guardia.- dijo Percy mientras apuntaba su arco hacia el cielo, y después de unos segundos varias Keres aparecieron rodeando todo el barco, los cinco chicos arremetieron con furia en contra de estas ellos lograron vencerlas pero en el cielo todavía muchas Keres esperaban ansiosas para atacarlos.

  - ¿Que están esperando?- murmuró Percy mientras caminaba hacia el extremo del barco, las Keres maliciosamente se movieron en su dirección sin querer perder de vista a este, él suspiro con frustración al ver que tenía razón. - Ustedes no deben de tardar más de dos horas en llegar al Campamento, cuando salte no me esperen, el campamento necesita el Vellocino de Oro así que no se detengan.- dijo el mientras caminaba hacia la cubierta del barco, pero Annabeth lo detuvo.

  - No lo puedes hacer Percy, tu no tienes por qué enfrentarte a Enio solo, ella te puede matar.- le rogó la hija de Atenea pero él negó con la cabeza de pronto.

  - Ella solo me busca a mi, acuérdate que mientras más tiempo pasa, el campamento esta más en peligro puede ser que ellos estén siendo atacadas en este mismo momento.- le dijo Percy tratando de convencer a su amiga. - Yo pronto las voy a ver, ustedes no se van a deshacer de mi tan rápido.- él volteo a ver a las demás chicas antes de saltar de la cubierta del barco, las Keres de inmediato siguiendo al hijo de Poseidon. Él utilizo sus poderes sobre el agua para atacar a las Keres, pero una bola de energía lo golpeó por la espalda lanzando al semidiós por los aires. Él trato de utilizar sus poderes sobre el agua para recuperarse pero Enio lo predijo y lanzó otra bola de energía lanzando contra la playa al semidiós.

  - Creo que ya es momento de que afrontes tu destino Percy.- dijo Enio reapareciendo frente a este. Él lo vio con furia mientras se ponía de pie tratando de idear un plan para atacar a la Diosa, pero esta se dio cuenta y arrojo una bola de energía lanzando a contra un autobús.

  - ¿Hijo estas bien?- cuestiono una señora al ver como Percy había interrumpido en el autobús.

  - Si no se preocupe Señora, es mi hobbie saltar a camiones en movimiento.- dijo él con sarcasmo mientras se ponía de pie, esperando a un ataque de Enio.

  - Siempre tan gracioso.- rugió ella mientras aparecía enfrente de este, él trato de golpearla pero esta lo sujeto por el cuello. - Se acabo el juego, es momento de que sufras.- rugió ella antes de lanzar a este por los aires.

  - Maldita sea.- murmuró Percy con dolor mientras trataba de poner de pie, pero Enio apareció enfrente de este golpeando en repetidas ocasiones al semidiós sin que este pudiera defenderse, él logro expulsar una ráfaga de agua alejando un poco a la Diosa. - Es mejor que te detengas o te va a ir peor.- dijo él con sarcasmo, Enio arremetió nuevamente hacia él pero esta vez Percy logro esquivar lo ataques antes de arrojar una ráfaga de agua hacia el piso elevándose por los aires. Enio trato de arremeter en contra de este, pero él saco su arco disparando varias flechas logrando detener el avance de esta. Él lo aprovechó para disparar otra ráfaga de agua al piso logrando aterrizar antes de alejarse con todas sus fuerzas de la Diosa, la cual disparaba varias bolas de energía para frenar a este. Él sonrió maliciosamente cuando vio lo que tanto estaba buscando, pero esto ocasionó que se distrajera lo cual Enio aprovecho para lanzar una bola de energía golpeando a este por la espalda.

  - Ya se acabaron los juegos.- rugió Enio con furia pero él logro esquivarla para después arrojar una ráfaga de agua distrayendo a esta. Por lo cual aprovecho para correr hacia esta brincando la valla que lo separaba.

  - ¿Que coño te pasa?- rugió una chica con disgusto al ver que Percy se aventaba en su alberca, ella trato de sacar a Percy de esta pero una explosión la hizo caer al suelo. Enio disparo una bola de energía hacia la alberca pero esta fue eliminada por un brazo de agua golpeando a la Diosa en el pecho.

  - ¿Ya no eres tan fuerte verdad?- cuestionó Percy con una sonrisa maliciosa mientras salía de la alberca con una armadura de hielo junto con su escudo y una lanza de hielo. Enio lo vio con furia a este antes de tratar de golpear a este, pero él utilizo su escudo para defenderse antes de arrojar una ráfaga de agua al piso haciendo que esta cayera al suelo, él trato de usar su lanza para atacar a esta pero Enio la destruyo con suma facilidad. Ella trato nuevamente atacarlo pero este dio un brinco para evitarlo, pero esta logro arrojar una bola de energía lanzando contra la pared a este, haciendo que este retrocediera unos pasos para lo cual ella arremetió nuevamente pero este alzo sus manos convocando varias serpientes de agua alejando a Enio de él.

Enio arremetió con furia mientras utilizaba su espada para matar a las serpientes pero estas se regeneraban de inmediato, él movió sus manos haciendo que las serpientes de agua se desvanecieran antes de convertirse en unas cadenas sujetando los pies y las manos de la Diosa. Enio trato de moverse pero este utilizo todas sus fuerzas para frenar a ella, antes de correr con todas sus energías logrando apuñalar a esta en el estómago. Enio rugió con dolor mientras expulsaba una enorme ráfaga de energía lanzando a este por los aires haciendo que este se estrellara contra el piso, - Eres un bastardo, no me importa si mi Señor te quiere vivo, tu morirás dolorosamente.- dijo Enio mientras arrojaba la espada de Percy lejos de donde estaba él.

Enio aterrizó dándole una patada a este en el estómago haciendo que este tosiera sangre, Percy quiso recuperarse pero ella se retiro antes de sujetar a este por el cabello golpeando a este en repetidas ocasiones en el rostro con su rodilla. Para después levantarlo y arrojarlo contra el piso a este. Él se quiso poner de pie pero ella le colocó su pie sobre la garganta no dejando que este se moviera.

Salto de Línea

Todas las chicas se quedaron en silencio mientras observaban como este se alejaba del barco, Hylla fue la única que reaccionó y camino hasta el cuarto de máquinas para encender los motores, después de todo Percy tenía razón, si no se daban prisa lo que hizo este no iba a contar de nada. Cuando ella regreso vio que todas seguían igual que como las había dejado.

  - Ya vamos a toda potencia no vamos a tardar mucho en llegar.- informo Hylla a las demás ocupantes, pero todas ellas seguían preocupadas por lo que le podía pasar a su amigo, - Tenemos que regresar Percy puede morir, él puede ser muy fuerte pero Enio es una Diosa.- dijo Annabeth con preocupación por su amigo, pero Clarisse negó con la cabeza, ella sabía que tenían que darse prisa para llegar al Campamento.

-Recuerda que tenemos que llegar lo más pronto posible al Campamento Mestizo.- dijo Clarisse seriamente pero no podía ocultar su nerviosismo.

-Yo tengo una idea.- dijo Hylla de pronto, todas ellas se voltearon a ver a esta para que hablará, - Reyna y yo podemos ir a ayudar a Percy mientras ustedes llevan el Vellocino de Oro al Campamento Mestizo.- Todas ellas se quedaron en silencio antes de asentir con la cabeza, Hylla y Reyna rápidamente tomaron la lancha antes de remar con todas sus fuerzas hacia la playa.

-Vamos Annie él va a estar bien, además esas dos chicas saben pelear muy bien. Ellas lo van a proteger.- le dijo Clarisse tratando de animar a su amiga pero esta solo observó como Reyna y Hylla se alejaban del barco, antes de asentir con la cabeza, solo esperaban que ellos pudieran derrotar a Enio.

-Quirón campamento Mestizo.- dijo ella mientras aventaba un dracma hacia el arcoíris. Ella esperaba encontrar al Centauro pero todo estaba tan desordenado en el campamento, - ¿Que es lo que está pasando Quirón?- pero el centauro no contesto, ellas solo pudieron ver como el Campamento era atacado por varios monstruos.

-Maldita sea.- dijo Clarisse con enfado al ver que no podían hacer nada para detener el ataque que estaba sufriendo el campamento, todas las cosas solo se complicaban más y más, - Te prometo que esos desgraciados me las van a pagar por habernos traicionado.- Annabeth estaba igual de furioso que su amiga solo esperaba que pronto llegarán, no podían dejar a sus amigos fueran asesinados por los monstruos.

Ellas dos se quedaron en silencio impacientes mientras veían el mar esperando llegar lo más pronto posible al campamento, después de una hora que para ellas pareció como un mes lograron llegar al Campamento Mestizo, ambas se pusieron furiosas cuando se percataron de un enorme incendio en este. Clarisse tomo el Vellocino de Oro antes de entregárselo a su amiga, - Tu llévalo hasta el árbol de Thalia, tenemos que volver a activar las defensas del Campamento, después nos encargaremos de ellos.- dijo Clarisse, Annabeth asintió con la cabeza antes de saltar del barco, logró ver varias de las cabañas en el campamento estaban destruidas mientras otras ardían en fuego pero aún los semidioses peleaban con furia contra los monstruos, ella logro ver a Luke y Chris entre los defensores del Campamento antes de correr con todas sus energías hacia la frontera pero ella fue atacada tirando al piso a esta dejando caer el Vellocino al piso. Ella quiso sujetar su daga pero alguien la piso.

-Lo siento por todo esto Annie, pero no puedo dejar que vallas al Árbol de Thalia, el campamento ya no tiene salvación.- dijo Luke con tristeza mientras veía la mirada de odio que le daba la hija de Atenea.

-¿Por que lo hiciste Luke? ¿Vas a dejar que todos los semidioses mueran?- pregunto ella con incredulidad sin poder creer lo que él había hecho, después de todo él también tenía amigos en el campamento.

-Ellos decidieron seguir siendo fieles a los Olímpicos mientras ellos no hacen nada por nosotros.- dijo Luke con furia tratando de convencer a su amiga después de todo no quería asesinarla, - A los Olímpicos no les importamos, solo les interesa su maldito trasero.- grito con furia mientras un gran rayo iluminaba todo el cielo, él solo soltó un bufido de frustración.

-Tu no tienes por que hacer esto Luke, tu no eres así aún puedes dejar a ellos.- dijo ella tratando de distraer a este, Luke se trató de alejar de ella pero esta coloco sus brazos sobre su cuello antes de besarlo en los labios. Luke sorprendido dejo caer su espada las suelo lo cual ella aprovecho para darle un rodillazo a la entrepierna, antes de sujetar el Vellocino de Oro, - No eres más que un bastardo cobarde, no sabes cuanto te odio.- dijo ella con furia antes de correr hacia el árbol de Thalia, seguida de un adolorido hijo de Hermes. Annabeth coloco el Vellocino de Oro encima de una de las Ramas del árbol de Thalia, segundos después este se iluminó en un ráfaga dorada al igual que toda la barrera que cubría al Campamento Mestizo, ella sonrió de alegría pero antes de que pudiera hacer algo su cabeza fue golpeada contra el árbol. Luke después lanzo una patada al pecho de ella lanzando a esta al piso, - Lo siento Annie.- dijo él mientras trataba de tomar el Vellocino pero ella se le abalanzó haciendo que los dos cayeran al suelo. Luke trato de golpearla pero esta logro detener su ataque.

- Vamos Luke aun te puedes arrepentir de todo lo que has hecho, no tiene que terminar así.- dijo Annabeth tratando de convencer a su amigo, después de todo a ella no le gustaba la idea de pelear contra este. Luke pareció dudar un  momento pero pronto su semblante cambio, golpeando a ella en el estómago. Annabeth se quiso poner de pie pero alguien la sujeto por la espalda, - Vamos Luke, ve por ese maldito Vellocino y larguemonos de aquí.- rugió Chris mientras trataba de sujetar a la furiosa hija de Atenea, Luke pareció dudar un momento antes de caminar hacia donde está a el Vellocino de Oro, pero este fue golpeado en el pecho por un rayo lanzando a este al suelo.

-¿Pero que cara...- se corto Chris cuando Annabeth logro safarse de su agarre y golpearlo en el estómago, él se recuperó de inmediato antes de tratar de atacar a ella pero otra vez un rayo lo golpeó en el pecho, Annabeth se quedo un momento de pie antes de voltear para ver a quien la salvo, pero se quedo helada cuando se dio cuenta, nunca se imagino que la iba a volver a ver.